martes, 11 de febrero de 2014

Más allá de la tumba...


Te perdiste de mi vida cariño, me olvidaste, me diste la espalda clavando en mi corazón la fría espada de tu desprecio. Me lastima y me mata lento que hasta ahora, tu adiós no me ha dejado de desangrar el alma, más no te culpo, ni rencor te guardo… Pero mírame, siente tan solo una vez lo que siento, ponte un instante en mi lugar, no pido te vuelvas mi mar.

Escucha el tictagueo de mi pecho, a veces se acelera, otras se detiene y aún presa del dolor me mantiene. Estoy ahora en mi recinto baldío, me encuentro en la penumbra de una vela sostenida en el rincón de mis entrañas, la mente anda revolcada entre tantas telarañas, que forman en mi cuerpo hircismos escalofriantes… Te recuerdo, te cuento a detalle todo lo que me atañe, todo lo que viví ahí, cuando me olvidaste cual juguete dañado tirado en la calle.

En mi puerto no ha parado de llover, aún ahora y aquí, después de años sigo muerta en vida, no he podido hallar en mí, la justa medida. A veces quiero volverte a ver… Más se corazón que el tiempo te ha devuelto a tu andar. Polvo al polvo amor… ¿Cuando has de retornar?

No deseo por nada volverte a cavilar pero mis manos tiemblan, la voz solloza y, aunque no lo quiera en ésta oscuridad estás. Mi pecho se encuentra vacío y titilante, cierro los ojos y te admiro también en aquello distante, solo el sentimiento se aferra a amarte, pues el cuerpo se me ha cansado, veo el horizonte infinitamente nublado, la piel se me ha arrugado. Años antes creí volvería a sentir esto por alguien más, volver a amar como a ti en su momento amé… Más el tiempo pasó tardío en mi andar. Ya jamás volví a soñar.

Te recuerdo, quise alejarme de este tormento y llegaste justo a mi encuentro… Hoy los años han cavado mi tumba, sigo viviendo entre penumbra, sigue siendo tu voz en mi pecho lo que retumba, sigues siendo tu mi cuma. 

Ahora el tiempo juega con lo que queda de esto, hace días no me paro de este rincón, sé que la muerte del cuerpo se encuentra cerca. Huele mi lecho a olvido, sabe a agonía mi alegría… Me voy esta noche vida mía. Te encontraré y te seguiré amando, te cuidare, seré tu suerte, tu dicha, la de tu familia, para que en este mundo cariño, no sientan lo que me dejaste por años amor… Desdicha.

Amor.
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11/Febrero/2014